La madre Acuario

Cuando por fin hayas decidido que unirte a una persona no significa renunciar a tu libertad, es posible que te lances a la aventura de ser madre. Lo más seguro es que este matiz aventurero sea el que realmente te incline a hacerlo.

Una vez tu bebé esté contigo, pensarás ¿y a este enano tengo yo que dedicarle toda mi atención? Tendrás que hacer un pequeño esfuerzo para conseguirlo. Lo que no te costará nada será participar activamente en las reuniones del colegio, incluso en la organización de cumpleaños, tómbolas, funciones...

Día tras día, tus hijos aprenderán de tu espíritu universal, de tus dotes para comprender los problemas ajenos, de tu corazón altruista y fraternal. Eso sí, jamás caerás en la tentación de sobreproteger a tus hijos, no va contigo, ellos deben sacar su propia lectura de la vida.

Tan sólo destacar una virtud que tus hijos valorarán mucho: tu facilidad para entender sus fallos, tu actitud tolerante ante sus confesiones más íntimas.

El padre Acuario

Los niños encontrarán en su padre Acuario a la persona que sabrá escuchar todas sus historias. Si el niño se empeña en contar un cuento, aunque sea interminable, captará el interés de Acuario o al menos éste así se lo hará creer. Abrirá los ojos como platos cuando aparezca el dragón y temblará ante su terrible llama...

Para el padre Acuario, las dificultades de su hijo con el fútbol o las lágrimas de su hijita porque se le ha roto la muñeca son simples problemas sin importancia. Puede que los niños echen de menos un poquito más de comprensión, sin embargo, Acuario transmite así su ideal de independencia. De hecho, él mismo procura no someterse a ataduras ni obligaciones y tampoco será capaz de imponérselas a sus hijos. Por lo tanto, tendrá que ser su pareja la encargada de establecer las normas y, si es necesario, los castigos.

Como nota curiosa, el padre Acuario resulta sensacional para resolver cualquier tipo de cuestión aritmética, sus hijos podrán encontrar un segundo profesor en casa.