El encantador signo de Libra es el séptimo signo del zodíaco. Libra es sinónimo de armonía, justicia, igualdad y equilibrio. Se te considera el signo más educado y civilizado del zodíaco, ya que siempre muestras una actitud serena y ecuánime.

Te rige Venus, el planeta del amor, el sexo y la belleza, y te hace luchar por crear armonía, expresar y mostrar afecto y adaptarte y complacer a los demás. Su energía seductora, romántica y sensual te convierte en una persona afable y que disfruta de las relaciones.

Libra es el segundo de los signos de aire, y te proporciona la capacidad de apartarte y ver las cosas de forma imparcial, siempre viendo y teniendo en cuenta ambas partes antes de tomar una decisión. Eres sociable, prudente y sientes una gran empatía por los demás, lo que te convierte en un compañero ideal, especialmente porque eres una persona honesta, afectuosa y agradablemente dinámica.

A tu signo le corresponde la séptima casa del horóscopo, la parte relacionada con las demás personas que son como un espejo para ti. Por lo tanto, describe la naturaleza de tus relaciones, tanto profesionales como personales, además de tus experiencias con el matrimonio y las asociaciones.

El modo de tu signo es cardinal, lo cual significa que tratas de mejorar y trabajar de forma activa en tus relaciones alcanzando y asumiendo compromisos e inspirando confianza.

Los puntos fuertes de los Libra se centran en su enfoque diplomático a la hora de relacionarse con los demás. Tu gran sentido de la justicia te convierte en una persona capaz de mediar y conciliar efectivamente, ya que siempre consigues ser objetiva y tener en cuenta todos los puntos de vista antes de tomar una decisión.

Sin embargo, incluso los Libra tienen puntos débiles. Por ejemplo, puedes ser una persona frívola e inmoral, y dar importancia a lo superficial. A veces, especialmente cuando estás indecisa, puedes ser ambigua, superficial e hipócrita. En determinadas situaciones, caes en la tentación de definir la "justicia" según te convenga.